Control de insectos y ventilación en el invernadero
El uso de la pantalla de control de insectos ayuda a garantizar el éxito del cultivo en invernadero. Las temperaturas cálidas ofrecen condiciones favorables para la reproducción de insectos. En algunos climas cálidos y húmedos, todo un cultivo de hortalizas o plantas ornamentales en un invernadero puede ser destruido por completo y, a menos que se controle, los invernaderos cercanos corren el riesgo de ser infestados. Las cada vez más estrictas regulaciones relacionadas con la protección de la salud, resultan en la reducción del uso de insecticidas y pesticidas químicos, y por ello el uso de mallas de alta calidad es una estrategia muy efectiva para la prevención de la entrada de plagas al invernadero. El uso de mallas anti insectos como parte de un sistema de manejo integrado de plagas cobra cada vez más importancia, y si se elige la malla adecuada y se instala y mantiene correctamente, se reducirá drásticamente la posibilidad de que entren insectos no deseados al invernadero.
Manejo integrado de plagas
El manejo integrado de plagas es un enfoque eficaz y ambientalmente responsable para el manejo de plagas que se basa en una combinación de prácticas de sentido común, con un enfoque natural y específico para la prevención y el control. Los productores tienen diferentes necesidades. Algunos necesitan la erradicación completa de las plagas, mientras que otros simplemente quieren controlarlas. El manejo integrado de plagas alienta a los productores a considerar todos los aspectos de la situación y luego los guía a encontrar las soluciones que resulten menos dañinas para las personas, la propiedad y el medio ambiente. Plagas como áfidos, trips, minador de las hojas y moscas blancas, son algunos de los principales enemigos de los productores en todas partes. Estos insectos entran en el invernadero con el viento a través de cualquier abertura que puedan encontrar. Evitar que estos pequeños insectos entren en la estructura es, para empezar, la mejor solución al problema. Una vez que se encuentran adentro del invernadero puede ser muy tarde para actuar y muy costoso, –la mejor solución del problema es prevenir el problema.
Importancia de la ventilación
Si bien las pruebas de detección no garantizan un invernadero completo libre de plagas, sí pueden marcar una diferencia enorme. Usar pantallas en las entradas de ventilación del invernadero también tiene su ciencia y hay que saber elegir el tipo de malla, ya que estas también afectan el flujo de aire dentro del invernadero. Las pantallas crean resistencia que reduce el flujo de aire; cuanto más grandes son las aberturas de la pantalla, mayor es el flujo de aire, pero más insectos caben por esas aberturas. Cuanto menor es el tamaño del agujero, mayor es la resistencia al flujo de aire, pero nos da una menor entrada de insectos.
Un invernadero con ventilación natural puede ser cubierto con malla; solo se necesita más material, ya que cada fuente de ventilación debe cubrirse para obtener un resultado óptimo. Pero, si el invernadero depende de ventilación artificial, se vuelve más complicado. Una malla inadecuada provocará un intercambio de aire inadecuado, lo que significa que es posible que los equipos de enfriamiento no funcionen correctamente. El flujo de aire restringido causa mayores caídas de presión estática y un mayor consumo de energía por parte de los ventiladores. Esto no solo implica mayores costos de energía, sino que también puede ocasionar un sobrecalentamiento de los equipos de enfriamiento y, a la larga, un aumento de la temperatura en el invernadero. Por lo tanto, es importante asegurarse de que se use la malla correcta para abordar cada problema específico de plagas.
No todos los insectos tienen el mismo tamaño y que no todas las pantallas tienen los mismos orificios. Se requiere de conocer las últimas estrategias de Manejo Integrado de Plagas y las fórmulas a utilizar para determinar qué tipo de malla funcionará mejor.
¿Qué tipo de mallas se requieren?
A principios de los ‘90s, se llevaron a cabo un significativo número de investigaciones relacionadas al micro enmallado. Fue reportado que, dependiendo del tamaño del torso de cada insecto se requiere de mallas con huecos o ventanas muy finas específicos para cada uno de ellos, y así poder excluirlos. Por ejemplo, la dimensión máxima recomendada de los huecos de la malla para excluir a los trips es de 192 micras (µm), lo que significa que estos huecos deben de ser apenas lo suficientemente grandes para dejar pasar un cabello humano, cuyo diámetro oscila en un rango de 170 a 181 µm. Un problema que surge como resultado de la reducción del tamaño de los huecos de la malla es el incremento del número de hilos por cm², y esto se traduce directamente en un aumento del área que ocupan los hilos. Este incremento de área ocupada por los hilos reduce el paso de aire a través de la malla y por consecuencia puede sobrecalentar los invernaderos.
Para solucionar el problema de poder tener una malla que contara con una distancia entre hilos de 192 µm y que permitiera el flujo del aire a través de ella, compañías con más alta tecnología han desarrollado mallas con hilos mucho más finos que las mallas convencionales y con la porosidad requerida para mantener plagas específicas fuera del invernadero y con una ventilación adecuada.
–
Recientemente en Latinoamérica, se ha comenzado a poner más atención en la colocación de mallas de mejor calidad. Se ha aumentado el nivel de especificaciones técnicas exigidas a los proveedores de mallas y se ha puesto especial atención a la manera en que están fabricadas. Los productores con experiencia exigen especificaciones geométricas de huecos que correspondan a aquellas que son necesarias para excluir cada insecto y además con un diámetro de hilos más delgado que aseguren un mejor flujo de aire dentro del invernadero.
El mantenimiento de la malla es fundamental para una protección exitosa. Los agujeros pequeños pueden obstruirse con suciedad y polvo, lo que reduce el flujo de aire. Se debe de mantener la malla limpia para un movimiento de aire eficiente y una buena salud de la planta en general. Se debe de limpiar las pantallas con un spray de presión moderada desde adentro hacia afuera. Lo mejor es esperar hasta el final del día cuando la ventilación natural por lo general ha disminuido. Esta limpieza debe de ser suave, ya que demasiada presión puede alterar los agujeros.
Dado el aumento de los problemas y los costos asociados con los pesticidas, el uso de prácticas integradas de control de plagas que incluyen micro mallas anti insectos es una necesidad para todos los invernaderos. Si se selecciona la malla adecuada, se instala correctamente y se le da un buen mantenimiento, evitará la penetración de insectos y, a la vez, proporcionará el máximo flujo de aire posible, esencial para obtener rendimientos de cultivos óptimos.